Acojo las palabras del Papa Francisco sobre «no juzgar» a las personas LGBTT con esperanza y optimismo, pero con cautela.
Ahora bien, no hay nada que juzgar. De hecho, la mera frase ya supone un prejuicio. Así que aunque sabemos lo que quiso decir, le exhorto al Papa que escoja mejor el lenguaje la próxima vez que toque el tema.
Por otro lado, no hay nada que «perdonar» sobre nuestra orientación sexual o identidad de género. Somos quienes somos y eso no es pecado, ni algo malo.
El pecado es la homofobia, el discrimen, la exclusión, la intolerancia, el odio.
Aún así, el Papa ha dado un primer gran paso: ha cambiado la tónica. Es un discurso más abierto y conciliatorio – y de menos condena.
Pero aún existe la condena. Para creerle al Papa, necesitamos ver acciones concretas a favor de los derechos LGBTT. O por lo menos, que no se opongan más.
Si hace eso la Iglesia Católica, entonces creeré en su palabra…
Pedro Julio Serrano es un destacado y respetado activista que ha dedicado gran parte de su vida a la lucha por los derechos de la comunidad LGBT y de los portadores de VIH, tanto en Puerto Rico como en Nueva York.
En 1998 Serrano se convirtió en el primer candidato abiertamente gay y VIH+, en la historia política de Puerto Rico, que compitió por un puesto público. Hoy es portavoz de la ‘National Gay and Lesbian Task Force’, una organización en pro de los derechos de la personas gays, lesbianas, bisexuales y transexuales.
Historias como la de él tienen precedentes en Nueva York. Tan sólo hace falta recordar el caso de la actriz dominicana Ilka Tanya Payán, quien tras revelar en 1993 que era portadora del virus, se convirtió en una luchadora y un ejemplo para toda la comunidad.
Como plasmaron las páginas de El Diario/La Prensa, en su edición del 15 de octubre de 1993, a Payán le preocupaba el estigma y el miedo que existía entre los hispanos con relación al Sida. «La ignorancia sobre esta epidemia es vergonzosa, especialmente en nuestras comunidades latinas e inmigrantes», dijo.
Problema que, según Serrano, no ha cambiado mucho en los últimos 20 años. «La realidad es que la incidencia en las comunidades de color es mayor», señaló el activista. «Tenemos que seguir educando para que ese mensaje llegue, para romper con la desinformación y con los prejuicios que todavía persisten».
Enfrentar ese prejuicio era una de las grandes preocupaciones de Payán, como consta en una carta que escribió para este periódico.
«El gran miedo es a esas reacciones acerca del Sida que todos tenemos cuando lo encaramos. Miedo a ser rechazados, miedo a ser cruelmente discriminados, miedo al señalamiento de infamia y deshonra», dijo la actriz.
Para Serrano, quien contrajo el VIH el mismo año en que Payán hizo pública su condición, aunque se han logrado grandes avances y se ha creado conciencia, aun existe el rechazo hacia la gente que tiene el virus.
«Al ser una enfermedad transmitida sexualmente hay muchos estereotipos y estigmas que van acompañados con eso, y se le trata de echar la culpa a la persona que vive con VIH, porque se les tilda de irresponsables, cuando esto le puede pasar a cualquiera», dice.
Serrano también coincide con las reflexiones hechas por Payán en cuanto a la falta de políticas públicas efectivas, la necesidad de aumentar los presupuestos para servicios de salud y la investigación en tratamientos.
«Ella dijo eso en el 93, y sigue vigente», dijo el boricua. «Los mismos problemas persisten, como la falta de fondos. Hay personas que todavía no tienen acceso a medicamentos, y sabemos que son medicamentos que salvan vidas».
Pedro Julio Serrano recibió el premio Dennis de León Voz de Compromiso Award 2013, en mayo pasado, durante la Gala Cielo Latino de la Comisión Latina sobre el Sida. Ilka Tanya Pagán murió en 1996 por complicaciones del Sida a la edad de 53 años, en su residencia de Manhattan.
El joven puertorriqueño Juan Luis Ortiz partirá la próxima semana hacia Bélgica para representar a Puerto Rico en el concurso Mr. Gay World. Ortiz, quien es el primer representante boricua en dicho concurso, luchará por el cetro al enfrentarse el 4 de agosto a 29 candidatos de diferentes países.
“Mi misión es educar sobre la comunidad LGBTT y ayudar a erradicar los problemas que aún persisten como el discrimen, los crímenes de odio, el bullying y la desigualdad. También quiero ayudar a combatir la pobreza y mayor acceso para las minorías a la educación superior”, aseveró Ortiz.
Ortiz, quien tiene cuatro hermanos y cuatro hermanas, se crió en Puerto Rico y en varios estados en Estados Unidos, incluyendo Massachusetts, Pennsylvania y Nueva York. Hace seis meses se mudó a la ciudad de Nueva York para desarrollarse como activista de derechos humanos. Actualmente se desempeña como director de alianzas estratégicas para Fora Financial, desde donde ayuda a pequeños negocios a conseguir capital para que crezcan sus negocios.
“Como alguien que fue víctima de bullying en la escuela por ser percibido como gay, quiero empoderar a los niños y jóvenes con la confianza en sí mismos para que sean fuertes y luchen por lo que creen. Al final del camino, todos somos seres humanos y merecemos vivir en paz y libertad”, dijo Ortiz.
Ortiz también es el embajador de marca para dot429, que es un medio social que está dirigido a profesionales LGBTT para que cultiven sus redes, interactúen, compartan ideas y colaboren entre sí. También, celebran eventos a través de Estados Unidos para crear conciencia sobre diversos asuntos y levantar fondos para organizaciones que trabajan con el VIH/SIDA, los crímenes de odio y el bullying, entre otros.
Sobre el concurso, Ortiz dijo que “esta es una gran oportunidad de representar a Puerto Rico dignamente y demostrar lo que nuestro país tiene que ofrecer. También, es una gran plataforma para ser una voz para las personas LGBTT y los latinos alrededor del mundo. Para mi, esta lucha no es por los derechos LGBTT nada más, es una lucha por los derechos humanos para todos”.
Por su parte, los organizadores y productores del concurso Mr. Gay World Puerto Rico, Jarl Haugedal y Michael Billy de Humanity Pride Productions, quieren enfatizar el compromiso profundo que tiene Ortiz de desarrollar una plataforma sólida en la población gay latina.
Ortiz tiene 30 años, mide 6’2”, es ariano, le gusta viajar, ir al gym, bailar salsa y el mofongo. Su libro favorito es “El Poder” por Rhonda Byrne.
Hace unos días, el País fue testigo de esa acción a través de la disculpa – pública y en corte – que me ofreciera Joseph Joel Morales Serrano por amenazarme de muerte a través de Twitter.
Antes de llegar al tribunal federal, ya yo lo había perdonado. Aprendí hace mucho a no albergar rencor, mucho menos odio, en mi corazón. Pero estando en la corte, viendo y sintiendo el dolor de su familia y de la mia, reafirmé ese perdón.
De hecho, yo no hubiera podido vivir tranquilo si Joseph Joel hubiera tenido que pasar un minuto más en prisión más allá de los tres días que ya estuvo en la cárcel federal. Además, que recibió una sentencia suspendida de tres años en la que estará bajo la supervisión de la corte. Y es que aunque sé que cuando se comete un delito, hay consecuencias, para mí el fin no es castigar, sino educar.
El juez José A. Fusté fue enfático en no tolerar la intolerancia. Se expresó en contra del odio que se expresa a diario a través de las redes sociales y en las secciones de comentarios de los portales cibernéticos de los medios de comunicación.
Al momento de sentenciar a Joseph Joel a tiempo cumplido tras declararse culpable, el juez Fusté me pidió que pasara al estrado y le dijo a Joseph Joel que me pidiera disculpas de frente.
Joseph Joel no lo pensó dos veces. Se acercó y me abrazó. Lo abracé de vuelta y lo sostuve un rato. Luego, gentilmente, lo aguanté e hice que nos miráramos. Quería reconocer su humanidad y que él me mirara a los ojos y reconociera la mía. Así fue.
Quién sabe si somos familia. Compartimos un apellido. Compartimos un País. Compartimos un caso que aunque inicialmente nos tenía separados, logró abrazarnos.
Es irónico que esta reconciliación puertorriqueña se diera en el tribunal federal – pero se dió. Ahora falta que esta reconciliación se multiplique en otras áreas de nuestra vida como pueblo.
Tenemos que celebrar nuestras diferencias, respetarlas, valorarlas. Pero cuando las diferencias son irreconciliables, tenemos que ver más allá de éstas y respetarnos los unos a los otros.
No quiero volver a corte. Quiero vivir en paz. Son muchos años de amenazas, ataques, burlas, insultos, atentados. Pero no soy sólo yo. Si fuera solamente yo, pues no habría problema.
Es que somos muchos los que sufrimos de este acoso, abuso, atropello a nuestra dignidad humana. Y si no detenemos esta ola de violencia, odio e intolerancia, se nos cae el País.
Es momento de respetar – y ojalá que podamos celebrar y valorar – las diferencias. Es el primer paso para la reconciliación puertorriqueña que tanto nos hace falta.
En el tribunal el amor venció al odio. Es hora de que en el País pase igual.
El activista de derechos humanos Pedro Julio Serrano se opuso a la propuesta que le pretende quitar el derecho al voto a los confinados.
«Algunos no estarán de acuerdo conmigo, pero eso no ha impedido nunca que asuma posiciones que entiendo son correctas y justas. No creo en quitarle el derecho al voto a los confinados. Los derechos adquiridos no se quitan. Empiezan por ahí y luego, ¿qué? Ya lo vimos con la fianza y con la Resolución 99. Este pueblo no apoya que se quiten o nieguen derechos. Luchemos porque se reconozcan y se fortalezcan más derechos, nunca menos», aseveró Serrano.
El portavoz de Puerto Rico Para Tod@s, organización que lucha por la igualdad de derechos y la inclusión de las personas LGBTT y la justicia social para todos los seres humanos, adujo que «nada se resuelve con quitarle el derecho a los confinados. El empeño debe ponerse en rehabilitar a los confinados, no quitarle un derecho adquirido».
«He sido víctima de crímenes – en plural – y aún así, no estoy de acuerdo en que le quiten el derecho al voto a los confinados. Aunque sea difícil para algunos, tenemos que verlos como los seres humanos que son y que no pierden todos sus derechos. Ya se les priva de la libertad. ¿Acaso eso no es suficiente? Negarles el voto es negarles la humanidad», concluyó Serrano.
SAN JUAN – En horas de la tarde del lunes, José Joel Morales Serrano se declaró culpable en un acuerdo previo y fue sentenciado a tiempo servido y tres años de libertad supervisada por su violación del código 18 USC la sección 875 (c), un delito clase D, de amenaza de comunicación interestatal, según anunció el martes, Rosa Emilia Rodríguez Vélez, fiscal de los Estados Unidos para el Distrito de Puerto Rico.
“Este es el primer caso en el Distrito de Puerto Rico, que ha dado lugar a una condena por delito grave por amenazar con la incitación al odio, contra un grupo particular y específico en nuestra comunidad”, explicó Rodríguez Vélez.
El 6 de mayo de 2013, aproximadamente a las 23:31, el acusado José Joel Morales Serrano utilizando el nombre de Twitter, “Carlito contra Bhatia @ leonidadpr”, señaló lo siguiente directamente a Pedro Julio Serrano: “ten cuidado en la marcha, puede terminar como en Boston pendejo”. José Joel Morales Serrano envió a sabiendas este mensaje en el comercio interestatal, en línea en Puerto Rico y recibido por Pedro Julio Serrano, mientras se encontraba en Nueva York.
“El acusado admitió que el mensaje contenía una amenaza real para causar daño a Pedro Julio Serrano en la medida en que hace referencia el 15 de abril del ataque terrorista de 2013 en Boston. El acusado también admitió a los agentes del orden después de su arresto que estaba tratando de molestar a Pedro Julio Serrano, haciendo su amenaza”, añadió la fiscal federal.
“La víctima, Pedro Julio Serrano se sintió amenazado a la recepción de este mensaje, se puso en contacto con el FBI, y estuvo bajo la custodia de agentes del Departamento de la Policía de Nueva York por un período de tiempo”, continuó diciendo Rosa Emilia Rodríguez.
El caso fue procesado por el fiscal de Estados Unidos Lucas Cass.
El activista de derechos humanos Pedro Julio Serrano exigió al presidente cameral Jaime Perelló a derogar el estipendio de $900 a los representantes o que use el dinero para darle aumento a los empleados de la Cámara.
«Este estipendio es totalmente inaceptable. Ante la crisis que vive el País, es inmoral. Se tiene que derogar de inmediato y si no se deroga, que se utilice ese dinero para darle un aumento a los empleados de la Cámara y hasta restituir a algunos de los 72 empleados de la Oficina de Servicios Legislativos que fueron despedidos. Es lo menos que podrían hacer para desenredar este entuerto», aseveró Serrano.
El portavoz de Puerto Rico Para Tod@s, organización que lucha por la igualdad de derechos y la inclusión de las personas LGBTT y la justicia social para todos los seres humanos, se unió a las miles de personas que se han expresado indignadas a través de las redes sociales por motivo de este estipendio de $900.
«Me pregunto a quién se le ocurrió semejante estupidez de este estipendio de $900 a representantes mientras hay gente que no gana eso en 3 meses y a veces ni en un año. Es insensible, inhumano e inmoral este estipendio. Me pregunto cuál de los representantes va a ser el primero y cuántos se le unirán en rechazar esta medida innecesaria e inaceptable. Esa es la pregunta», concluyó Serrano.
Un joven acusado por amenazar a Pedro Julio Serrano a través de la red social Twitter le pidió disculpas al activista de la comunidad Lésbica, Gay, Bisexual, Transexual y Transgénero (LGBTT) y le dio un abrazo, a instancias del juez federal José A. Fusté.
Joseph Joel Morales Serrano, de 26 años, hizo esta tarde, alegación de culpabilidad por acoso cibernético, al transmitir por medio del comercio interestatal o extranjero una comunicación que contiene una amenaza de causar daño a otra persona, y fue sentenciado al tiempo cumplido de cárcel -tres días cuando fue arrestado- y tres años de libertad supervisada, además de cerrar su cuenta de Twitter por tres años.
El juez Fusté le preguntó al hoy convicto si era cierto que el 6 de mayo pasado, usando el seudónimo Carlito anti Bhatia@leonidapr, escribió en la cuenta de Twitter de Serrano: «Cuidado en la marcha que puede terminar como en Boston pende…», a lo que Morales Serrano contestó que sí.
La amenaza se refería a la marcha del Día Internacional contra la Homofobia, que se llevó a cabo el viernes 17 de mayo pasado en el Viejo San Juan y en la que Serrano no participó, y hacía referencia al ataque del Maratón de Boston, el 15 de abril pasado.
A preguntas de Fusté, Morales Serrano indicó que era «disc jockey», que trabaja en un supermercado y que está haciendo las gestiones para estudiar ingeniería de sonido. Antes de dictar la sentencia, el juez le dio la oportunidad para decir algo.
«Yo pido disculpas. Nunca pensé que causara tanto problema. Nunca pasó por mi mente hacer daño. Tengo una nena de 6 años (se le quebrantó la voz), he hecho sufrir a mis padres, a mi esposa, les pido disculpas. Le pido disculpas a Pedro Julio Serrano y a la comunidad Lgbtt (lésbica, gay, bisexual, transexual y transgénero), que se sintieron ofendidos o amenazados. He aprendido mi lección. Pido sinceramente disculpas, no fue mi intención hacerle daño. Fue una estupidez grande de mi parte escribir eso. De mi parte, no se va a repetir jamás en mi vida», expresó Morales Serrano, leyendo de una carta que escribió.
Fue entonces que Fusté preguntó si Serrano estaba en sala, y este se puso de pie. Le dijo que se acercara para que el acusado pudiera pedirle perdón de frente y así hizo, abrazándolo. Al sentenciarlo, el juez le dijo que se alejara «de esa mier…», refiriéndose a Twitter.
Lloroso, Serrano expresó que «todos podemos decir lo que queramos, pero no amenazar la integridad de nadie». Destacó que ha sufrido mucho por las 35 personas que han fallecido en los pasados tres años por crímenes de odio y que «una palabra puede terminar con la vida de alguien».
«Reconozco que todos cometemos errores y él ha aprendido de esto. Puerto Rico necesita más amor, respeto y entendimiento», agregó Serrano en sala. Fue el propio juez quien al principio de la vista manifestó que en la Isla, se pasan de la raya, pensando en la libertad de expresión.
«Aquí en Puerto Rico están constantemente cruzando la raya, no sé si es por la cultura o desorganización social. Cruzan la raya en Facebook, en Twitter, en los comentarios de la gente en los periódicos electrónicos. Usando malas palabras que en otras sociedades del mundo no se dejarían publicar y aquí se tolera y cada día que pasa es peor. No veo los comentarios que publican. Son horrendos, faltando el respeto a las personas que piensan distinto a uno… Aun cuando se arrepiente, alguien que lee esto pueda actuar», señaló el juez.
El abogado Héctor Ramos, de la Oficina del Defensor Público Federal, aceptó que lo que hizo su cliente fue «una estupidez» y que su cliente no sabía el impacto que podría tener en la víctima, pero que la investigación de las autoridades federales determinó que no tenía material para actuar sobre su amenaza y que es primer ofensor, además de que los tres días que pasó en la cárcel federal «fueron los peores de su vida».
Satisfecho Pedro Julio
Al salir de sala, Serrano indicó que sintió que el abrazo fue «genuino» y que quiso mirarlo a la cara «para conocer su humanidad».
«Estoy satisfecho. No quería ser responsable de que un padre de familia fuera a la cárcel, ya pasó tres días, pero hay consecuencias de sus actos y tiene que atenerse a las consecuencias… Espero que el mensaje de amor, respeto, compasión haya calado. Qué pena que no había cámaras adentro para que se viera la reconciliación que tenemos que tener a pesar de nuestras diferencias. Apuesto al amor siempre», manifestó Serrano, quien estuvo acompañado por sus padres Héctor Mujica y Alicia Burgos, sus hermanos y otros amigos, entre ellos, la transexual Ivana Fred Millán.
Por su parte, Morales Serrano -quien en sala vistió una camisa rosada- se cambió a una camisa azul y se puso gafas para tratar de que los periodistas no lo reconocieran cuando salió del Tribunal Federal.
A toda prisa, dijo que lo que dijo fue la «verdad, nada ficticio» y que no tiene problemas con Serrano ni con la comunidad Lgbtt. «A veces, uno hace cosas ignorantes. A veces, uno se excede de las cosas. Cada cual debería seguir mi ejemplo», sostuvo Morales Serrano, quien aseguró que nunca volverá a usar Twitter.
Joseph Joel Morales Serrano se declaró culpable, le pidió perdón y abrazó al defensor de los derechos humanos Pedro Julio Serrano, a quien amenazó a través de su cuenta en Twitter con equiparar una marcha hacia La Fortaleza con el Maratón de Boston, donde murieron decenas de personas a raíz de la colocación de un artefacto explosivo.
Se trata del primer caso por ‘ciberacoso’ que radican las autoridades federales en Puerto Rico. Hay otros pendientes.
Morales Serrano fue sentenciado a cumplir probatoria y el juez federal José Fusté le prohibió tener una cuenta de Twitter por tres años, no sin antes criticar que en Puerto Rico existe “una combinación de intolerancia, odio y cultura de macho” que se proyecta hasta en las páginas cibernéticas de los periódicos a través de las opiniones que los lectores vierten y que a su juicio, “deben ser controladas por el editor”. Sostuvo que hay permisibilidad, que “aquí en Puerto Rico constantemente se cruza la línea, quizá por cuestión cultural, o que vivimos en una sociedad desorganizada, siempre se cruza la línea”.
El abogado del acusado, Héctor Ramos Vega, de la Oficina del Defensor Público, reclamó en corte que se exageró cuando a su cliente se le señaló inicialmente como quien comete un crimen de odio y que los tres días que estuvo en el Centro de Detención Metropolitano “fueron suficientes”.
Después su cliente leyó unas declaraciones. “Pido disculpas… lo que hice fue producto de mi ignorancia. Nunca pasó por mi mente hacer daño. Soy un joven padre de familia, tengo una hija de seis años (lloró) me gustaría verla crecer. Entiendo la situación causada por mí, he hecho sufrir a mi padre, mi madre, mi esposa, mi hermana, que están aquí. Les pido disculpas por cualquier otra persona que se haya sentido ofendida”, expresó Morales Serrano en la sala de Fusté, en el Tribunal Federal.
Añadió que “no fue mi intención hacerle daño a él ni tampoco a otra persona”, añadió el disc jockey, en relación a Serrano.
Aceptó que el pasado 6 mayo a eso de las 11:31 p.m. bajo el seudónimo “Carlito anti Bhatia@leonidarp”, escribió “Pedro Julio Serrano cuidado en la marcha que puede terminar como en Boston pende…”.
Por su parte, Serrano, activista de los derechos de la comunidad lésbica, gay, bisexual, transexual y transgénero (LGBTT), dijo en sala que “constantemente vemos violencia en contra de nuestra comunidad, ha habido muertes… Joseph Joel es un padre e hijo, yo soy padrino e hijo, mi familia está aquí y sufre cada vez que me atacan”.
Fuera del Tribunal dijo que sintió que el abrazo de Morales fue genuino y su arrepentimiento sincero, y que espera que todos aprendan, “el País va a cambiar, está cambiando”. “El juez Fusté me impresionó enormemente. Muchas de las cosas que él dijo podían haber salido de mi boca. Eso quiere decir que el mensaje de amor e inclusión de la comunidad LGBBT ha calado hondo”, indicó Serrano. Hizo un llamado a la reconciliación en todos los ámbitos.
Entretanto, Morales, quien vistió camisa rosada durante la vista, salió con un polo negro y gafas. Mientras caminaba a toda prisa, expresó que “no tengo nada que decir… sí, leí una carta de disculpas, fue sincera. Nada fue ficticio”. A preguntas de periodistas admitió que “sí, aprendí la lección, que todo aquel que se dedica a lo mismo (acoso cibernético) pare. A veces uno se excede de las cosas”. Aseguró que nunca más abrirá una cuenta en Twitter, uan red social en la cual se transmiten mensajes de 140 caracteres y permite interactuar con otros usuarios.
Inicia juicio en Puerto Rico por amenaza a activista gay
San Juan – A las cinco de la tarde de este lunes se iniciará la vista del juicio en contra de Joseph Joel Morales Serrano, acusado de amenazar de muerte al activista gay Pedro Julio Serrano.
Ante el juez José Fusté se presentará el inculpado en el Edificio Federal, en Hato Rey. Morales Serrano presuntamente amenazó a al activista gay Julio Serrano a través de su cuenta de Twitter.
Según informaciones extraoficiales, el hombre se declarará culpable y se espera que este mismo lunes sea condenado.
Morales Serrano fue arrestado el 20 de mayo por agentes del Negociado de Investigaciones Federales (FBI).
El joven, de 25 años, es procesado por ciberacoso, luego de que el 6 de mayo pasado, a las 11:31 p.m., bajo el seudónimo de CarlitoantiBhatia@leonidapr escribió en la red social un mensaje dirigido a la cuenta de Serrano que decía: «Cuidado en la marcha, que puede terminar como en Boston, pend…».
Por Carmen Milagros Díaz y Miguel Rivera Puig, EL VOCERO
El primer acusado en Puerto Rico de ciberacoso, Joseph Joel Morales Serrano, quien amenazó de muerte al activista de derechos de los homosexuales, Pedro Julio Serrano, se declarará culpable hoy.
La vista de admisión de culpabilidad está pautada para las 5:00 de la tarde en la sala del juez José Fusté en el Tribunal federal, en la avenida Chardón de Hato Rey. Se espera que hoy mismo sea sentenciado. Debido a que se programó una vista de admisión de culpa se entiende que el Gobierno llegó a un acuerdo con Morales Serrano. Se desconoce cuál es la recomendación del Gobierno en torno a la sentencia.
Morales Serrano presuntamente utilizó la red social Twitter y mediante el seudómimo de `Carlito anti Bhatia@leonidapr’ escribió a la cuenta de Serrano «Cuidado en la marcha que puede terminar como en Boston pend…», en referencia a la marcha del Día Internacional contra la Homofobia que se realizó días más tarde al reciente atentado terrorista en el Maratón de Boston.
Morales Serrano fue arrestado por agentes del Negociado de Investigaciones Federales (FBI) el mismo día de la marcha. El arresto se produjo en su hogar en el apartamento 845 del edificio 82 del residencial Ramos Antonini, en San Juan.
El hombre admitió a los agentes federales que fue él quien envió el mensaje y que era el dueño de esa cuenta y «que frecuentemente cambiaba sus cuentas personales de correo electrónico».
El individuo, que según trascendió se ganaba la vida como `disk jockey’, enfrenta la justicia federal por ciberacoso al transmitir por medio de comercio interestatal o extranjero una comunicación que contiene una amenaza de causar daño a otra persona. Por este delito la sentencia es de hasta cinco años de prisión.
El perjudicado, que es activista de los derechos de la comunidad lésbica, gay, bisexual, transgénero y transexual (LGBTT), confirmó que estará presente, no indicó si será llamado a testificar. Serrano se mostró esperanzado en que este caso sirva para que las personas dejen de amenazar.
El gobernador Alejandro García Padilla también ha sido objeto de ciberacoso. El mandatario recibió una amenaza de muerte en su cuenta de Twitter el pasado mes de junio.
El ciberacoso o `cyberbullying’ se define como el uso de información electrónica y medios de comunicación para acosar a un individuo o grupo, mediante ataques personales, difamatorios o de intimidación.