Todo parece indicar que un sector de las comunidades lésbica, gay, bisexual y transgénero (LGBT) y personas aliadas ha despertado del letargo. El pasado jueves, cientos de personas nos tiramos a las calles de Río Piedras para denunciar la homofobia del 8 de Blanco. En un evento que resultó en un despertar de la indignación de las comunidades LGBT en contra de la homofobia que nos aqueja, cientos de manifestantes dejamos bien claro que no toleraremos ni un abuso más.
Y es que hace poco más de un mes, ante la crisis que azota a las comunidades LGBT como consecuencia de la homofobia que nos agobia y la apatía internalizada que nos paraliza, hice un llamado a despertarnos. Durante este tiempo, sucedieron actos lesbofóbicos en contra de una pareja de lesbianas en el negocio El 8 de Blanco, localizado en la comunidad universitaria de Río Piedras. Ante el abuso y el atropello sostenido y constante por parte de la gerencia y personal de dicho establecimiento en contra de miembros de las comunidades LGBT, un grupo de jóvenes liderad@s por José García y Sahir Pujols, se organizaron para denunciar el discrimen. Entre muchas acciones, crearon un grupo en Facebook, hicieron comités de trabajo, llevaron las denuncias a los medios de comunicación y organizaron lo que se convirtió en una de las manifestaciones más numerosas en contra de la homofobia en la actualidad.
Para que tengas una idea de lo que allí ocurrió, mira el siguiente reportaje que fue realizado por Leo Santiago y Andrea Victoria La Fem, el equipo de producción de Viva la Diva Loca, que se lleva a cabo todos los jueves en la discoteca Krash con nuestra diva/activista Jaime Sunflowers:
Como puedes notar, esta exitosa manifestación y la organización detrás del Comité contra la Homofobia en Río Piedras son una clara señal de que no podemos tolerar un abuso más, de que tenemos que darnos a respetar, de que tenemos que dar la cara si queremos que las cosas cambien.
Confío en que la solidaridad representada por esta acción denunciando el prejuicio y exigiendo un detente a la homofobia del 8 se repita, día a día, hasta que erradiquemos el discrimen. Es nuestra responsabilidad lograr la igualdad de derechos, es nuestra responsabilidad exigir el trato igual en todo momento, en todo lugar.
Como dije anteriormente, las personas lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros somos tan human@s como lo son las personas heterosexuales. Si queremos el reconocimiento de que nuestras vidas, nuestras relaciones, nuestras identidades y nuestras aportaciones son tan válidas como las demás, tenemos que exigirlo de pie, de frente, de cara al sol. Como hicimos en el 8, como tenemos que hacer en todo Puerto Rico.