No hay manera fácil de decirlo: la comunidad lésbica, gay, bisexual y transgénero (LGBT) tiene que despertar. La oposición a la nominada Procuradora de las Mujeres, Johanne Vélez, por favorecer los derechos de todas las mujeres, irrespectivamente de su orientación sexual e identidad de género. La nominación de tres personas al Tribunal Supremo que han tenido decisiones judiciales o comparten filosofías excluyentes. La posibilidad de que se reviva la nefasta Resolución 99. La promesa de eliminar la Orden Ejecutiva que prohíbe el discrimen por orientación sexual e identidad de género en el empleo público.
La homofobia motivada por la intolerancia religiosa en vez de seguir el mayor postulado de la fe, el amar l@s un@s a l@s otr@s. Los crímenes de odio que siguen sin esclarecerse, ni tomarse en serio. La homofobia que nos arropa y la hipocresía social que la tolera. El abuso en locales donde gastamos el dinero pero no podemos demostrar nuestra identidad porque si no, somos expulsad@s. La ceguera partidista que no permite entender que cuando de derechos se trata, la ideología de estatus pasa a un segundo plano. L@s miembros de las comunidades LGBT que validan la homofobia y los prejuicios de otr@s para ser tolerad@s en vez de ponerse de pie y exigir lo que nos corresponde. La falta de comunidad que nos agobia, la apatía, el conformismo, la falta de solidaridad con nosotr@s mism@s. La inacción, la desesperanza, la complacencia. El asesinato de un@ de l@s nuestr@s, Lonrry Lemus, en un mar de confusión.
La realidad es que somos tan human@s como lo son los heterosexuales. Somos tan dign@s como lo son ell@s. Somos tan iguales como lo son ell@s. Somos tan puertorriqueñ@s como lo son ell@s. Pero para que lo reconozca la sociedad, tenemos que exigirle el detente a la homofobia, al prejuicio, al odio que le ciega y que se responsabilice por el sufrimiento, el dolor y las vidas que se han perdido por la intolerancia. Pero también tenemos que ser visibles y valientes para enfrentar esa intolerancia, exigir lo que por derecho nos corresponde y afianzar la dignidad que sabemos que tenemos pero que es violada día a día.
Es hora ya de que la comunidad LGBT despierte, salga de su letargo, se ponga de pie y exija el respeto a nuestra dignidad individual y colectiva. Este despertar no puede esperar un segundo más. Si queremos libertad, tenemos que exigirla. Si queremos derechos, tenemos que exigirlos. Si queremos ciudadanía plena con los mismas protecciones a sabiendas de las responsabilidades que ya cargamos, tenemos que exigirla. Si queremos el reconocimiento de que nuestras vidas, nuestras relaciones, nuestras identidades y nuestras aportaciones son tan válidas como las demás, tenemos que exigirlo de pie, de frente, de cara al sol.
Es hora de despertar. Es hora de exigir. Es hora de salir del clóset individual y colectivo. Llegó el momento de la verdad… o permitimos que nuestra dignidad sea atropellada sistemáticamente, diariamente, descaradamente. O vamos a levantarnos, con dignidad, con respeto y con firmeza, para detener el abuso, la homofobia y el odio que no nos merecemos.
Si nosotr@s no lo hacemos, entonces quién…
es más que eso. mucho más. no sólo hemos perdido nuestra capacidad de indignarnos, hemos perdido nuestra habilidad para expresar dicha indignación; dicha indignación tampoco tiene alcance, no tenemos energía para indignarnos.
lo primero que hay que hacer es formar una comunidad LGBTT. lo lamento por quienes piensen que ya en puerto rico hay una; sólo porque tenemos una parada de orgullo gay cada año, no significa que tengamos una comunidad. ya basta de cada cuál coger por su lado. la comunidad jamás florecerá si hacemos eso. ya basta de la apatía, del ‘yo estoy bien, así que lo demás no me importa’, ya basta del ‘que se joda’. ahora mismo, muchos de nosotros, hombres gay, mujeres lesbianas, transexuales envejeceremos SOL@S!!! esta comunidad es demasiado hedonista, y tenemos que cobrar conciencia. se nos hizo tarde ya.
el asesinato de lonrry está envuelto en un misterio que aparenta no tener ninguna solución. sería una pena que esto se descubriera como un crimen de odio, y la comunidad se quede de brazos cruzados. pero bueno, qué comunidad? cuál comunidad? aquí hay comunidad?
Lo mas triste que nos ha pasado es haber perdido nuestra capacidad de indignarnos.
Somos parte de la misma sociedad que justifica a los criminales, permite el abuso contra mujeres y ninos, criminalizan a las victimas, que no asume responsabilidad sobre sus propios actos.
Me pregunto si alun dia nos levantaremos como decia Julia de Burgos en su poema A Julia de Burgos:
«Cuando las multitudes corran alborotadas
dejando atrás cenizas de injusticias
quemadas, y cuando con la tea de las siete virtudes,
tras los siete pecados, corran las multitudes,
contra ti, y contra todo lo injusto
y lo inhumano, yo iré en medio de
ellas con la tea en la mano.»
Por si acaso, me refiero al apoyo masivo de los gays y lesbianas a Fortuño y al PNP. Eran tantos que si uno decía en Tia María’s que era popular o pipiolo o del coquí, te linchaban. No puede haber quejas ahora.
Pedro Julio, mi esperanza es que se cumpla lo que te preocupa. Espero que nos quiten todos los derechos, nos cierren las barras y nos entren a palo cuando estemos reunidos en clubs y en las aceras de santurce; que nos boten de los trabajos y nos quiten a nuestros hijos. Entonces yo me pararé con un cartel que diga: «nosotros votamos por ellos». El apoyo de la comunidad GLBT (si es que hay comunidad) fue masivo. Ese fue el cambio que ellos pidieron. Yo no moveré un dedo. Más no podemos hacer. Cuando se ponga las cosa dificil, mi familia es bilingue, tenemos oportunidades de empleo en otros lugares, nos largaremos de este agujero entre el mar y el cielo. Hasta que todos seudo-gays y seudolesbianas de mente y espiritu colonizado y el corazón lleno de auto-homofobia no sufran el discrimen y el maltrato en carme propia no van a reaccionar. Mientras se puedan ir a emborrachar todos los fines de semana a una barra, no va a cambiar la situación. He dicho. ¿Pregunta cuantos han ido a ver la pelicula Milk? Pocos, no les interesa. Se averguenzan de ir.
Definitivamente estoy de acuerdo con lo que expresas. Ese letargo en que esta comundiad boricua LGBT esta es terrible. Quizas parte de la misma comunidad misma mantiene esos temores. Pero debemos hacer como hacen en otros paises, sin miedo, con cara al futuro y listos para la lucha, no armada, sino inteligente y social, protestar y levantar nuestra voz, tomar las ollas y los calderos y sonarlos todos los dias a la misma hora, abarrotar las oficinas de los legisladores con correspondencia y llamadas y otras cosas mas…. Y en cuando a lo que dices, voy a usar la frase de JFK… no es lo que la nacion pueda hacer por ti sino lo que TU puedas hacer por ella.
¿Amor, y que mas yo puedo hacer? Dime, para ayudarnos.
Yo hago lo que sea.