Va a ser crudo lo que voy a escribir, pero tengo que hacerlo – para que se entienda de una vez.
El líder de PR por la Familia, César Vázquez, dijo esta mañana por radio que el sobreviviente del crimen de odio que se radicó ayer «se buscó la paliza por estar en lugar de alto riesgo».
Los fundamentalistas no tan sólo tratan de descartar los crímenes de odio con este tipo de bajezas, sino que incitan a la intolerancia que son la raíz de estos ataques.
Esta retórica no es muy diferente a lo que me comunican a diario decenas de personas a través de correos electrónicos, tuits y mensajes por Facebook.
Me desean la muerte, me amenazan de muerte, me tratan de matar. En estos últimos 15 años, estas instancias – de tentativas de asesinato y amenazas de muerte – han pasado una y otra vez en mi vida.
Y estoy aquí – de pie, con la frente en alto, con mi dignidad intacta.
He vencido dos de las peores enfermedades de nuestros tiempos – el cáncer y el vih. He vencido los dos atentados contra mi vida – cuando me cortaron los cables de los frenos de mi carro y cuando cuatro tipos con armas largas me cortaron el paso.
Me voy cuando me toque, no antes. Pero de algo estoy seguro, si algo me pasara, sepan que he vivido plenamente y que mi vida no ha sido en vano.
Aún así, pronto me mudo a Puerto Rico y no tengo miedo. Estoy en paz, mi gente, en completa, absoluta y plena paz. Pero ese soy yo, hay miles de personas que están en posiciones vulnerables por ser LGBTT y esta retórica de odio tiene que DETENERSE YA.
Responsabilizo a los fundamentalistas por estos ataques homofóbicos y estos crímenes de odio.
Específicamente responsabilizo con nombre y apellido a César Vázquez, a Wanda Rolón, a Milton Picón, a Ricky Rosado, a René Pereira, a Miguel Sánchez Avila, a Jorge Raschke, a Carlos Sánchez, y a todo aquel y aquella que siga promoviendo esta agenda de odio e intolerancia en nuestra patria.
YA BASTA. Puerto Rico somos tod@s… ♥