Nuestro País está creciendo, evolucionando, madurando, avanzando frente a nuestros propios ojos.
Lo que antes era considerado aceptado como la norma – entiéndase, la homofobia, la desigualdad, la indiferencia, la apatía, entre muchas otras cosas que no nos representan como pueblo – ya está cambiando.
Ahora se ven, se sienten, se afianzan la solidaridad, la protesta, la empatía, la equidad, la inclusión, entre muchas otras cosas – que sí nos representan y nos definen como pueblo.
En los últimos meses, hemos presenciado un despertar de conciencia. Detuvimos el intento por quitar derechos como el de la fianza, tuvimos una huelga exitosa que finalmente logró que se derogara la cuota injusta, sacamos una administración insensible y abusadora del poder, detuvimos el programa televisivo más nefasto de nuestra historia, se acabó el abuso de asesores legislativos que insultan y ofenden, no nos engañamos con la marcha odiosa, ni con el Supremo disparate.
El Pueblo está en pie de lucha, como nunca antes. Ya no aguanta pasos a medias, engaños, ni palabras. Quiere acción, quiere cambio, quiere un Puerto Rico para tod@s.
La nación está naciendo ante nuestros ojos. Un Puerto Rico libre, solidario, respetuoso, amoroso, sensible, inclusivo está surgiendo.
La patria afirma su identidad – la que siempre hemos tenido, pero que se empeñaron en tratar quitárnosla – y así reafirma su dignidad.
Se ve en el horizonte el Puerto Rico para tod@s – que siempre hemos soñado y que merecemos. Es cuestión de más esfuerzo y por supuesto, de un poco de tiempo… ♥