Apesadumbrado al leer a alguien de nuestra comunidad llamarme «sidoso, loca, afeminado, patito débil, enfermo venéreo» por defenderme y defender a las personas LGBTT tras el ataque homofóbico del boxeador Wilfredo Vázquez, Jr.
Esto me recuerda el largo trecho que nos queda por caminar en la ruta hacia la igualdad y la justicia. Cuando alguien de nuestra propia «comunidad» utiliza estos epítetos es sinónimo de homofobia internalizada, de sexismo y misoginia. Y peor aún de desprecio a quienes vivimos con vih.
Le recuerdo al compañero, que en la vida no se sabe si uno puede caer con alguna enfermedad y espero que la gente tenga para usted, la compasión que no tuvo para quienes vivimos – con dignidad inquebrantable e imperturbable – con vih.
Le recuerdo al compañero que ha sido la misma homofobia y sexismo que usted pregona las que han sido obstáculos en el reconocimiento de sus propios derechos.
Mucha paz y mucho entendimiento al compañero y a tod@s aquell@s que tienen que entender que un ataque homofóbico, sexista, inhumano o intolerante dicen más de ell@s que de l@s que vivimos en libertad.
ACTUALIZACION: Al fin de cuentas, el tuitero se disculpó y acepté sus disculpas, no sin antes desearle paz, bien y SALUD y recordarle que nunca dé por sentado su salud, pues uno sabe de hoy, pero NUNCA de mañana…