El activista de derechos humanos Pedro Julio Serrano le exigió hoy a Jenniffer González, portavoz de la minoría cameral, que actúe con la mayor celeridad ante el ataque despreciable y vicioso de su asesora Heidi Wys en contra de él.
«El tiempo de las excusas se acabó. Exhorto a González a que haga una investigación para que se descubra si es cierto lo que alega su asesora que su cuenta de Twitter fue ‘jaqueada’. Sólo así se sabrá la verdad sobre si en efecto fue ella quien escribió el ataque mezquino y bajuno en mi contra. Es lo menos que puede hacer la portavoz de la minoría cameral», aseveró Serrano.
El líder comunitario aprovechó para agradecer a su familia, a sus padres, su novio y hermanos, por el apoyo público que le han dado. También, agradeció a la Alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, tras solidarizarse con él anoche a través de su cuenta de Twitter. Cruz escribió: «Pedro Julio no dejes que corazones pequeños te distraigan. Tu generosidad y compromiso construye una nueva forma para la dignidad de todos!»
Además, agradeció a varias figuras públicas que se han solidarizado con él, tales como Johanna Rosaly, Silverio Pérez, Topy Mamery, Gisselle y Yolandita Monge, quien escribió en su cuenta de Twitter «Pedro Julio, representas el amor, la verdad, la justicia, la transparencia, la tenacidad, el compromiso, la valentía… a mi representas!» Rosaly escribió en Twitter que «tod@s somos madres o padres, herman@s, amig@s, vecin@s, compañer@s de trabajo de gays. ¡Y no somos «poquitos» ni «un grupito!».
Por otro lado, anoche se creó el grupo «Quítale el Dinero al Odio» (http://www.facebook.com/NoDineroAlOdio) que ya tiene más de 3,000 miembros. El grupo tiene como objetivo «que nadie en el gobierno reciba contratos si van a promover el odio. No a la intolerancia en el gobierno». Además, el grupo ha creado una cuenta en Twitter @NoDineroAlOdio (http://twitter.com/NoDineroAlOdio) que ya tiene más de 300 seguidores.
Serrano no descarta entablar una demanda civil en contra de Wys. «Los funcionarios públicos no pueden – aún cuando sea en sus horas libres – atentar en contra de la dignidad humana. No tan sólo es inmoral, sino que es anti-ético e ilegal. De hecho, tendrá que probar en corte que le ‘jaquearon’ la cuenta y que lo expresado en Twitter no fue ella. Es todo lo que diré por el momento, pues ya habrá tiempo para anunciar el curso de acción».