Hay gente que no quiere que hablemos de nuestra orientación sexual o nuestra identidad de género. Que eso es cosa de la intimidad dicen. Que no estrujemos nuestra identidad en la cara de nadie. Que eso no importa.
Esas son precisamente las razones por las cuales tenemos que hablar sobre nuestra completa humanidad. Porque hay que deconstruir la heteronormatividad que se impone y que quiere mantenernos en la oscuridad y la invisibilidad.
Pero también soy un ser humano – tan imperfecto y tan digno como los heterosexuales. No quiero ser perfecto, ni ejemplar, quiero ser humano. Y quiero todos – TODOS – mis derechos, ahora.
Qué viva nuestra lucha por la igualdad y la justicia, pero que nunca se nos olvide que es una lucha por la liberación también. Qué viva la libertad… ♥