Por Cindy Burgos | CB en Español
Por mayor equidad. Por igualdad salarial. Por una educación con perspectiva de género. Por la autoridad de decidir sobre sus cuerpos. Por un aborto seguro y accesible. Por la maternidad libre. Por la separación de iglesia y estado. Por los derechos de las mujeres trans y las inmigrantes. Contra la violencia de género. Contra la exclusión de las mujeres en el poder y la historia. Contra las políticas de austeridad, que a quien más afectan es a las mujeres jefas de familia.
“Si nosotras paramos, el país se detiene”. Con este estribillo cientos de mujeres puertorriqueñas se unieron hoy al Paro Internacional de Mujeres que se realizó en sobre 50 países en conmemoración del Día Internacional de la Mujer Trabajadora este miércoles, 8 de marzo.
Las manifestantes no solo reclaman equidad y mejores derechos, sino respeto por su cuerpo y sus decisiones. Por eso muchas acudieron con sus hijos, con el pecho desnudo y con carteles con mensajes por la equidad. También reclamaron la auditoría de la deuda pública —la cual ha sido rechazada por el gobierno— y que no se impongan políticas de austeridad, como un recorte en la jornada laboral que sugirió la junta de control fiscal.
De igual forma, solicitaron la renuncia del alcalde de Guaynabo, Héctor O’Neill, quien alegadamente transó los pasados días una querella por hostigamiento sexual contra una subalterna suya, agente de la Policía Municipal.
Es esta la última gran marca del machismo en la isla, que se suma a la violencia de género que ha cegado la vida de cinco mujeres en lo que va de año: Arelis Suárez, de 31 años, asesinada a puñaladas por su exnovio Félix Ramos en Juana Díaz; Sacha Torres, de 24 años, encontrada muerta en un motel de Aguadilla; Jacqueline Rivera, de 27 años, recibió cuatro tiros mientras trabajaba como bailarina exótica en Río Piedras; Wanda Collazo, de 42 años, asesinada de múltiples disparos en Humacao; y Ninoshka Rodríguez, de 9 años, asesinada por su papá Jesús Quijano en un residencial de Santurce.
“Macharrán, macharrana, conmigo no te equivoques, te voy a dar candela, no me mires, no me toques”, “Nosotras parimos, nosotras decidimos”, “Si siguen abusando, una huelga están buscando”, “Esta crisis fiscal que la pague el capital” y “No la debemos y no la pagaremos” eran algunos de los estribillos que coreaban al son de bomba las manifestantes, que detuvieron por tres horas el tránsito en la avenida Luis Muñoz Rivera, intersección con la calle Carlos Chardón, frente al edificio de UBS.
No solo la violencia machista fue rechazada durante la manifestación. La joven Katia Pacheco, estudiante de la escuela especializada en ballet Julián Blanco, se expresó en defensa de los estudiantes de escuela pública y expresó que el machismo también se expresa en las canciones, en las que muchas veces las mujeres son tratadas como objetos sexuales. También lanzó críticas a la invisibilización de las mujeres en la historia y en la educación escolar.
“La cultura manipula la historia… Desde la escuela nos inculcan sutilmente a aprender más sobre los logros masculinos que los femeninos. ¡Estamos hablando de nuestros logros!… Por favor, no sigan escondiendo mis luchas y mis logros”, declaró Pacheco durante la manifestación.
Por su parte, la joven trans Daniela Victoria Arroyo reclamó durante el evento una educación con perspectiva de género y el respeto de las personas transgénero y transexual.
“Promover el odio y el discrimen no está bien. El machismo mata, crea una cultura de violación. A las mujeres trans se les niegan las mismas oportunidades que al resto de la población… Se nos ha hecho creer que nuestra feminidad es débil. En la escuela, los maestros me trataban de varón, en la escuela los estudiantes me gritaban ‘pato’… Hasta que no pare el abuso, la desigualdad, el discrimen. Hasta que no seamos libres, no voy a parar ni vamos a parar todas”, exclamó Arroyo.
Mientras tanto, Tania Silva, doula y educadora prenatal que acudió a la protesta con sus dos hijos, se manifestó en contra de la violencia machista en las salas de parto, así como de la violencia en la calle, donde muchas mujeres tienen que tienen que escuchar “piropos” y expresiones sobre sus cuerpos sin quererlo.
La portavoz de la Coalición 8 de Marzo, Ruth Arroyo, explicó a Caribbean Business que la manifestación frente al edificio UBS es la culminación de la jornada que inició esta mañana con la detención del tránsito en el expreso José de Diego, y continuó con piquetes en la Universidad de Puerto Rico (UPR) en Río Piedras y el Departamento del Trabajo en Hato Rey, así como protestas en Arecibo, Mayagüez, Utuado, Cayey, Fajardo, Vieques y Loíza.
“Estamos contra las políticas de austeridad, pensamos que la junta es una institución que no es democrática, exigimos la auditoría de la deuda antes de las políticas de austeridad en la educación, en la UPR, en la salud… Que haya separación de iglesia y estado, que tengamos el control de nuestros cuerpos, por ejemplo, el derecho al aborto, acceso a salud preventiva, y obviamente queremos parar la violencia”, expresó Arroyo sobre los reclamos de la manifestación.
Entre los manifestantes se encontraba el luchador de los derechos humanos Pedro Julio Serrano, así como los líderes políticos María de Lourdes Santiago, exsendora del Partido Independentista Puertorriqueño, Rafael Bernabe y Mariana Nogales, excantidatos a la gobernación y comisaría residente por el Partido del Pueblo Trabajador, respectivamente.