
No estoy de acuerdo con la detención de las jóvenes por el bullying en la escuela de Ponce.
Hay muchas soluciones: educación tanto para la escuela, como los padres, prevención, trabajo comunitario, terapia contra la violencia, etc.
Pero castigar de esta manera a unas jóvenes que también son víctimas no me parece ni apropiado, ni necesario.
Es más, me parece hasta sexista el hecho de que fueran dos niñas a quienes se utilizó para enviar este «mensaje disuasivo», pues según much@s – erróneamente – en nuestra sociedad, las niñas y las mujeres no pueden pelear así, tienen que ser «señoritas».
La realidad es que nadie tiene que recurrir a la violencia para resolver los problemas – NADIE.
A mi me atacan a diario, me insultan, soy víctima de bullying, de acoso, de amenazas, de atentados contra mi vida. Y cómo he respondido? Con amor, con respeto, con educación, con prevención, con trabajo comunitario.
Es hora de que ataquemos la raíz de la violencia – la desigualdad. Eduquemos en el amor, el respeto, la dignidad… de todo ser humano.
Sólo así podremos combatir efectivamente el bullying. Lo contrario sería poner un parcho y que jamás solucionará el problema mayor… ♥