No quiero que acabe este día sin dejar algo bien claro a quienes recurren a amenazas, manipulaciones e insultos. Sobre todo, luego de las últimas denuncias que he hecho.
La última vez que dijeron que yo estaba solo en esta lucha, tuvieron que pedirle disculpas a la comunidad LGBTT. Pues claramente no estoy solo, aquí hay una comunidad y un@s aliad@s que dan la batalla por la igualdad y la justicia para tod@s en Puerto Rico.
Han tratado y no han podido callarme – ni callarnos. Quienes me amenazan – quienes nos amenazan – no conocen la historia de esta lucha. Mi reto es claro: ¡qué echen pa’lante! Que estamos list@s pa’ defender nuestra dignidad…