Una vez más acudo al llamado de la patria. En esta ocasión, la visita es agridulce por la grave situación del país, pero igualmente importante. Muchas personas me aconsejaron cambiar este viaje, posponerlo, cancelarlo… pero creí necesario continuar con los planes.
Primero, porque la vida tiene que continuar. Aún con la crisis, los miembros de las comunidades lésbica, gay, bisexual y transgénero (LGBT) seguimos relegados a una ciudadanía de segunda categoría y tenemos que hablar de nuestra realidad en todo momento. Segundo, quise solidarizarme con nuestro pueblo en un momento de tanta incertidumbre y ayudar, en la manera que me sea posible, en brindar esperanzas a nuestra gente. Tercero, mi familia está tan dispuesta a contar su historia que era imperativo hacerlo justo antes del Día de las Madres y del Día de los Padres y brindar una nueva tónica a estas celebraciones.
Yo creo en mi gente. Creo en Puerto Rico… pero tenemos que involucrarnos más, tenemos que dejar a un lado la apatía, el conformismo, la falta de solidaridad, la insensibilidad que nos arropan. Tenemos que tomar las riendas de nuestra patria.
Esta crisis debe ser una dolorosa lección para que aprendamos que debemos reinventar nuestro país. Reconstruirlo desde nuestras raíces… reconociendo quienes somos y hacia donde queremos ir. Esto necesitará mucha valentía de nuestra parte, pero también de líderes (no l@s usuales) que den un paso al frente y le hablen al pueblo con la verdad. Que pongan la agenda de Puerto Rico primero. Líderes de todos los sectores que dirijan el rumbo de nuestra patria.
Yo siento mucha esperanza… las crisis son buenas para revolucionar nuestras vidas y rehacerlas. Dentro de todo este proceso, debemos que pensar en el modelo que nos presenta Alternativa Ciudadana, un partido local del precinto 1 de San Juan que presenta la democracia participativa, con decisiones tales como las presupuestarias en un modelo en que el pueblo decide como se utilizarán los fondos públicos. Tal vez, debemos mirar hacia el partido Puertorriqueños por Puerto Rico que presenta una idea de abolir la maltrecha institución del matrimonio y dejársela solo a las iglesias, estableciendo el derecho a establecer pareja, sin importar orientación sexual, ni vínculos… el derecho a establecer un contrato legal con la persona que cada ciudadan@ escoja.
También tenemos que exigir a nuestros líderes que nos hablen con la verdad, exigir responsabilidad con el dinero que con tanto esfuerzo damos al Gobierno, exigir justicia social para todos los seres humanos, exigir acceso igual a los servicios de salud, exigir igualdad de oportunidades para todos los seres humanos, exigir educación para el rescate de nuestros valores como el respeto a las diferencias, la solidaridad, la responsabilidad ciudadana.
Tenemos que ser el cambio que queremos ver… si queremos líderes que respondan a la agenda de Puerto Rico, tenemos que quitarnos las vendas partidistas y elegir candidat@s que representen nuestros intereses, no los de un@s poc@s. Tenemos que dar nuestro tiempo, dinero, energía a las causas en las cuales creemos. Tenemos que exigir mejores programas de televisión que representen nuestros valores, no que degraden a seres humanos.
Tenemos que criar para la paz, Tenemos que abandonar la violencia y la intolerancia que nos arropa. Tenemos que ponernos en el lugar de los demás. Tenemos que ser optimisitas. Tenemos que creer en nosotr@s mismos. Tenemos que ser solidari@s.
Somos puertorriqueñ@s primero. Hagamos de Puerto Rico, nuestra prioridad.
Hoy llego a la patria y dentro de la crisis, veo la esperanza asomarse en el horizonte. Llego con la esperanza de que Puerto Rico se crecerá ante esta encrucijada y seremos mejores y más valientes y más reponsables y más orgullos@s de ser puertorriqueñ@s y valorar lo que tenemos y protegerlo y reforzarlo.
Seamos el cambio que queremos ver… que no se nos olvide que los jefes del Gobierno somos nosotr@s. Que no se nos olvide que nuestro futuro no está en manos de l@s polític@s… nuestro futuro está en nuestras manos. Lo hicimos con Vieques… repitamos a Vieques. Seamos el cambio. Seamos mejores.
Yo creo en Puerto Rico.Yo creo en mi gente. Yo creo en Puerto Rico.
Adelante, herman@s — Puerto Rico puede. Yo sé que podemos.