
La Ada que yo conozco no es de la China, ni del Japón…
La que yo conozco nació en el barrio de mi corazón.
En esta lucha por los derechos de las comunidades lésbica, gay, bisexual y transgénero (LGBT) puertorriqueñas he conocido incansables luchador@s por la igualdad, pero ningun@ como Ada.
La licenciada Ada Conde, presidenta de la Fundación de Derechos Humanos (FDH), ha sido una fuente de inspiración para este servidor. Cuando nadie me quería al yo abandonar mi carrera a un puesto público, Ada me recogió y me nombró Director de Política y Medios de la FDH. Junt@s hicimos maravillosas luchas, pero el destino nos separó un poco.
Me dejé llevar por oasis en el desierto, creyendo en personas que no querían a Ada y me alejé de ella. Seguí teniendo buenas relaciones con ella, pero alejado. Ella siguió luchando, nada la detuvo, nada la detiene.
Lucha sola, lucha en equipo. No importa la cirscunstancia, ella lucha. Se ha unido a esfuerzos colectivos, como ha hecho esfuerzos individuales. Tiene un grupo de incondicionales, su esposa, su staff, sus voluntari@s. Pero tiene algo que le falta a much@s… un pasión que corre por sus venas, un compromiso inquebrantable, una fe sin dudas.
Much@s en este caminar se creen estrellas, se creen que hay que rendirle pleitesía, que sus años en la lucha les merece reverencia, que no se les puede cuestionar, que tienen la razón y que se hace sólo lo que ell@s dicen.
Que equivocad@s están!
La razón no grita, la razón convence.
Y muchos me dirán, pero si Ada grita… y les contesto, no grita – ese es su tono de voz. Ese es el tono de su pasión, esa es la voz de su corazón.
Porque Ada pone su corazón en todo lo que hace, lucha para lograr éxitos y adelantar la lucha por la igualdad. Nunca antepone ningún interés, todo lo contrario, ha gastado muchísimos de sus contados recursos para lograr que se apruebe la Ley de Crímenes de Odio, para que el Artículo 103 se eliminara, pues fue la arquitecta principal de la estrategia de involucrar a la comunidad heterosexual en el debate para derogar el delito de sodomía, y ha sido aliada de todas las luchas.
Sola o con un equipo, sola o con alianzas, sola o con su gente, sola o con tod@s… Ada ha estado y estará ahí.
Ya quisieran much@s que se autoproclaman líderes contar con la consistencia, temple, integridad, honestidad, visión, compromiso, amor y liderato que Ada tiene.
Ada, tu hijo te dice gracias por tu amor a tu patria, gracias por tu amor a tu gente, gracias por tu entrega incondicional, gracias por tu cosecha…
Puerto Rico está en deuda contigo, mujer de mil batallas.
