
Por Wilmariely Agosto | El Vocero
En una vista de estatus de la reforma de la policía ante el juez Francisco Besosa del Tribunal Federal del Viejo San Juan, el activista de derechos humanos Pedro Julio Serrano consignó sus preocupaciones respecto al manejo de la Uniformada en los casos que afectan a miembros de la comunidad Lgbttiq+.
A su vez, el Departamento de Seguridad Pública (DSP) discutió con el juez los temas de reclutamiento de cadetes, la urgencia de nuevas tecnologías y el uso de fuerza por parte de los miembros del Negociado de la Policía.
Serrano verbalizó todas las áreas que, desde su punto de vista, deben ser atendidas para que haya un manejo óptimo y respetuoso donde se garanticen los derechos civiles de la comunidad Lgbttiq+. “Claramente, el gobierno está tratando de pintar que están en cumplimiento con la reforma de la policía. La realidad del caso es que cuando se trata de la vida de las personas Lgbttiq+, no están cumpliendo con nosotros. Tenemos una iniciativa de trabajo que llevamos prácticamente un año trabajando a petición nuestra. Cuando empezó la reforma de la policía nos incluyeron a nosotros, nosotros dimos adiestramientos, trabajamos los protocolos, establecimos el lenguaje y cómo se iba a utilizar y miembros de nuestras comunidades hicieron ‘role play’ y eso se abandonó”, expresó Serrano.
Dijo que han propuesto múltiples ideas, como la creación de un grupo de trabajo Lgbttiq+ por agencia, tanto estatal como federal, para abordar temas específicos por agencia y “no ha sucedido”. Del mismo modo, plasmó que solicitaron un calendario de capacitaciones por agencia y conocer qué personal ha sido capacitado, pero “no se ha materializado”.
Además, mencionó que los principales errores de la Policía al momento de atender escenas de miembros de la comunidad son cuando identifican a una mujer trans como “hombre con ropa de mujer” o dicen el nombre con el que la víctima no se identifica. Mencionó, además, que los crímenes en contra de la comunidad “se tienen que investigar como crímenes de odio para descartar que ese fue el ángulo” y, según dijo, no siempre se hace.
Otra propuesta puntual ha sido “crear una entidad independiente y ciudadana para evaluar protocolos, capacitaciones, denuncias y situaciones que ocurren en torno a personas LGBTQ+ en el Departamento de Policía y el Departamento Correccional”, pero, mencionó, “está siendo evaluado”.
Dentro de ese listado, se encontraba establecer una persona que sirva de enlace con la comunidad Lgbttiq+, y precisamente esta semana el DSP lo designó.
Cuando Serrano finalizó su alocución en sala -donde plasmó casos actuales- el magistrado Besosa le agradeció por haber asistido al estrado, pero le aclaró que su ordenamiento en este caso es evaluar la reforma policiaca, no los casos que acontecen diariamente.
Buena comunicación
En las afueras del tribunal, el secretario del DSP, Alexis Torres, enfatizó que mantiene buena comunicación con el activista y que “siempre ha estado presente”.
“Llevamos meses trabajando con reuniones, como él mencionó con los directores de agencia federal y del DSP. En varias ocasiones nos hemos reunido también con el coronel Roberto Rivera, que le hemos hablado y le hemos explicado, dentro del margen de lo que nos permita la investigación, cómo van esas investigaciones para poder darle a él detalles”, indicó Torres a preguntas de periodistas.
Uno de los planteamientos de Serrano es que alegadamente ya no incluyen -como al inicio- a la comunidad en los adiestramientos de la Uniformada y este tipo de intervenciones podrían influir para que los policías tuvieran más tacto al atender este tipo de casos.
“Yo puedo decir que cada policía ha sido empático trabajando con cada una de las investigaciones referentes a la comunidad. Tengo que decir que cada capacitación, cada entrenamiento, nosotros lo tomamos serio y obviamente siempre buscamos como atemperarnos con la realidad y con las diferentes situaciones”, respondió.
Reforma y sus avances
Igualmente, Torres mencionó que en la vista discutió los “avances” que ha tenido la Uniformada en el cumplimiento de la reforma y celebró que en los próximos meses trabajarán para comenzar academias para formar entre 2,500 a 3,000 cadetes. “Si logramos esa meta de mínimo 2,500 cadetes, pues definitivamente añadido con la tecnología, vamos a poder ser más eficientes y poder tener más policías en diferentes áreas”, manifestó.
Para incrementar las academias y los cadetes, la Policía se unirá a la Universidad Ana G. Méndez
Asimismo, Torres dijo que hoy solamente restan 19 áreas de cumplimiento relacionadas con tecnología y que, en el pasado, eran 62 donde se incumplía. Para esto, alegó que necesitan más fondos y que continuarán comunicándose con la Junta de Control Fiscal.
A modo de ejemplo, proyectó que aproximadamente para el 2026 todos los miembros de la Uniformada tendrán una cámara corporal.